Cuando hablamos nos gusta utilizar superlativos que intensifiquen el significado de lo que decimos: megabueno, superinteresante, un calor de muerte, tela de gente, etc.
Estos intensificadores enseguida se desgastan, dejan de servir para lo que nacieron y son sustituidos por otros que la novedad hace que cumplan su misión a la perfección.
Hace una década empezó a utilizarse una estructura que sirve para estos menesteres y que da muchas dificultades de comprensión, sobre todo a los estudiantes de los primeros años. Por eso le hemos dedicado a "...no, lo siguiente" este vídeo.
Si queréis profundizar más, os recomendamos este artículo publicado hace un año en Verne.
Si queréis más ejemplos con esta estructura echad un vistazo a twitter @eslosiguiente
